PRESENTACIÓN DE CASOS
Apraxia severa por atrapamiento
del nervio radial en el brazo: “síndrome de Lotem”. Presentación de un caso
Juan Martín Patiño,* Alexis Fernández,** Nicolás
P. Mondino,** Alberto L. Garay,** Bernardo Andrés,**
Carlos E. Martínez,** Igor Orsolini**
*Servicio de Cirugía de Mano y
Miembro Superior, Departamento de Ortopedia y Traumatología, Hospital Militar
Central “Cirujano Mayor Cosme Argerich”, Ciudad Autónoma de Buenos Aires,
Argentina
**Cirugía de Miembro Superior,
Instituto Dupuytren, Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Argentina
Resumen
Se presenta el caso
de un hombre de 57 años que consulta por parálisis alta del nervio radial, con
dolor y prueba de Tinel positiva en la cara lateral del brazo dominante, de
inicio súbito, luego de grandes esfuerzos musculares repetitivos, sin mejoría
clínica al tercer mes de evolución. Se realizó un tratamiento quirúrgico
descompresivo. El paciente tuvo una rápida recuperación a partir del séptimo
día, y remisión completa a los 25 días de la cirugía. Conclusión: El atrapamiento del nervio radial en el brazo es un
cuadro poco frecuente. Según los estudios publicados, la evolución clínica es
variada, pero si no hay remisión o la evolución de la parálisis no es favorable
en 3 meses, creemos que la cirugía es el tratamiento de elección.
Palabras clave: Nervio radial; síndrome de Lotem; apraxia; atrapamiento nervioso.
Nivel de Evidencia: IV
Severe Apraxia due to Entrapment of the Radial
Nerve in the Arm: “Lotem Syndrome”. Case Report
ABSTRACT
We present the case
of a 57-year-old male patient who consulted for high radial nerve palsy, with
pain and positive Tinel test on the lateral side of
the dominant arm, of sudden onset after great repetitive muscular efforts,
without clinical improvement after three months of evolution. A decompressive surgical treatment was performed, presenting
a rapid recovery since the 7th day and full recovery after 25 postoperative
days. Conclusion: The entrapment of
the radial nerve in the arm is a rare pathology and its clinical presentation
may vary. We consider that in the face of no remission or favorable evolution
of paralysis within the first three months of conservative treatment, surgery
should be performed.
Key words: Radial nerve; Lotem
syndrome; nerve apraxia; nerve entrapment.
Level of Evidence: IV
Introducción
La
parálisis alta del nervio radial por atrapamiento tras esfuerzos musculares
repetidos es un cuadro inusual y existe escasa evidencia publicada sobre su
tratamiento y evolución.
El nervio
radial ingresa en el brazo a través del triángulo humerotricipital para formar
parte del contenido del canal de torsión en íntima relación con la cara
posterior de la diáfisis humeral. Entre 11 y 13 cm proximal al epicóndilo
lateral, el nervio atraviesa el tabique intermuscular externo de posterior a
anterior, en dirección a la corredera parabicipital lateral.1-3 El
orificio que da lugar al paso del nervio del compartimento muscular posterior
al anterior del brazo se corresponde con un posible sitio de compresión o
distracción del nervio.1,3 Se conoce como síndrome de Lotem4 a la
neuropatía compresiva del nervio radial a dicho nivel. Esta afectación produce,
según la gravedad de la compresión, una parálisis de extensores de la muñeca y
de los cinco dedos de la mano, generando una apraxia severa y una incapacidad
significativa para desarrollar las actividades de la vida diaria.3,4
El objetivo de este artículo es comunicar el caso
de un paciente con apraxia severa del nervio radial por atrapamiento en el
brazo, que tuvo una rápida recuperación luego del tratamiento quirúrgico.
Caso clínico
Hombre de
57 años que consultó en nuestra institución, por dolor (8 puntos en la escala
analógica visual) en la cara lateral del tercio medio del brazo, de inicio
súbito tras realizar trabajos de albañilería con esfuerzos repetidos, de tres
meses de evolución. En el examen físico, se constataron signos de parálisis
motora del compartimento dorsal del antebrazo, con impotencia para la extensión
de la muñeca y los dedos correspondientes al grado M0 de la escala Medical Research Council (MRC) para
fuerza muscular, sin compromiso para la extensión del codo. La movilidad pasiva
de codo, muñeca y mano era completa. Además, tenía hipoestesia en el dorso del
antebrazo y la mano en el territorio del nervio radial. La prueba de Tinel
resultó positiva a la percusión de la región lateral del brazo, principalmente
en un punto ubicado a 11 cm, aproximadamente, hacia proximal del epicóndilo
lateral. El cuestionario QuickDASH (Disabilities
of the Arm, Shoulder and Hand) en la primera consulta arrojó un puntaje de
77,3 (Figura 1).
Inicialmente,
mientras se aguardaban los resultados de estudios por imágenes y la
electromiografía, se indicó un tratamiento conservador que consistió en reposo
con férula termoplástica en extensión de muñeca y antinflamatorios no
esteroides, además de terapia ocupacional para mantener una movilidad pasiva
completa de la muñeca y los dedos, y fisioterapia con sesiones semanales de
electroestimulación.
La
electromiografía a los tres meses del comienzo del cuadro informó lesión severa
del nervio radial con posible axonotmesis.
Se
descartaron masas de tejido circundante que pudieran comprimir el nervio radial
en su recorrido mediante un par radiográfico y resonancia magnética, la cual
confirmó un nervio radial íntegro.
Con los
estudios solicitados y sin evidencia de signos clínicos de recuperación motora
o sensitiva, se indicó la exploración quirúrgica.
Se practicó un abordaje lateral longitudinal de
brazo de 6 cm centrado en el punto álgido. Se continuó con una disección
profunda siguiendo el tabique intermuscular lateral. Luego se identificó el
nervio radial en la salida del canal de torsión. Se lo observó comprimido,
entre el tabique intermuscular externo y las fibras musculares dependientes del
vasto externo del músculo tríceps. Los vasos del perineuro radial se
visualizaron congestivos sin evidencia de formación de un neuroma. Además, los
signos de compresión se incrementaban en forma dinámica, luego de la flexión
del codo y la pronación del antebrazo. Se procedió a su liberación tras
escindir el tejido circundante. Por último, se realizó una neurólisis bajo
magnificación (con lupas) de 3 cm proximal y distal a la zona de compresión
(Figura 2).
En el
primer control a las 48 h de la cirugía, no se detectaron complicaciones. En el
segundo control, al día 7, se constató una débil extensión de la muñeca y los
dedos (escala MRC = M2). Al día 25 posoperatorio, la recuperación del rango de
movilidad y la fuerza de muñeca y dedos eran completas (MRC = M5).
A los 12
meses de seguimiento, no se detectaron limitaciones funcionales (MRC = M5), la
movilidad del codo y la muñeca era completa, la recuperación de la sensibilidad
era total y el puntaje QuickDASH fue 0 (Figura 3).
Discusión
En la
actualidad, hay escasas publicaciones sobre apraxia grave por lesiones
nerviosas compresivas del nervio radial en la cara lateral del brazo. En
comparación con estos reportes y con otros pacientes tratados en nuestro
Servicio, en el presente caso, se obtuvo una recuperación clínica completa y
precoz, luego de la descompresión quirúrgica.
En 1971,
Lotem y cols.4 definieron la compresión atraumática del nervio
radial en el brazo al publicar una serie de tres pacientes con parálisis
transitoria del nervio radial después de haber realizado esfuerzos musculares
repetidos. Adjudicaron su etiología al bloqueo de la conducción nerviosa
producida por una arcada de tejido fibroso sobre el nervio radial en el extremo
inferior del surco espiral, que fue demostrado por disecciones cadavéricas
posteriores. También comprobaron que esta arcada daba origen a fibras
musculares accesorias de la porción externa del tríceps. Los autores asociaron
el edema muscular posesfuerzo a la compresión nerviosa en dicho nivel y
propusieron que las personas con gran masa muscular eran propensas a sufrir
este cuadro. A diferencia de nuestro caso, los tres pacientes de ese estudio
tuvieron una recuperación espontánea progresiva a partir del tercer día del
inicio de los síntomas.
En 1985,
Sunderland5 sugirió un mecanismo adicional, consideró que el extremo
distal del canal de torsión puede actuar como un punto de fijación en el
recorrido del nervio, ejerciendo a ese nivel una tracción interna excesiva, si
se realizara una brusca y forzosa extensión del codo. También se ha
correlacionado esta presentación clínica con otras patologías potencialmente
compresivas, como exostosis de húmero, secuelas de fracturas de húmero o
tumores de partes blandas circundantes.6 Dichos diagnósticos fueron
descartados en nuestro paciente mediante la interpretación de las radiografías
y las imágenes por resonancia magnética.
Se cree
que, en estos bloqueos de conducción, se produce inevitablemente una
recuperación completa luego del cese del estímulo favorecedor de la compresión
nerviosa, ya que la continuidad axonal queda preservada y que la causa es
naturalmente reversible. Sin embargo, la recuperación puede retrasarse varios
meses o el cuadro puede resultar irreversible.5
Mitsunaga
y Nakano,7 Manske,8 y Nakamichi y Tachibana9
comunican casos de pacientes sometidos a cirugía después de un año del comienzo
de los síntomas y que no mostraron ningún signo de recuperación posterior. Sin
embargo, Lubahn y Lister10 publicaron un raro caso: tres de los
cinco integrantes de una familia habían sufrido una parálisis radial alta de
manera espontánea (sin antecedente de esfuerzos). Entre ellos, una mujer de 32
años se presentó a la consulta luego de evolucionar a una parálisis radial
progresiva en el transcurso de cuatro años. Fue tratada con descompresión
quirúrgica y recuperó una fuerza motora M4 a M5 luego de seis meses.
La
evolución de este caso coincide con Mackinon y Novak quienes recomiendan que
“si no existe evidencia clínica de recuperación en 3 meses, se realizarán
estudios electrodiagnósticos. Si estos no muestran evidencia de reinervación,
debemos considerar la liberación quirúrgica del nervio radial”.11
Se ha reportado una forma de presentación
oligosintomática cuando el mecanismo compresivo no es de intensidad suficiente
para producir una paresia/parálisis. En este caso, la ubicación y el tipo de
dolor neurítico deberían guiar el diagnóstico. Adolfsson y Nettelblad,12
en 1999, y Bowman y cols.,13 en 2018, publicaron series de casos sin
antecedentes de traumatismo, con sensibilidad local aumentada, sensación de
hormigueo y dolor que se incrementaba a la percusión del nervio radial (signo
de Tinel) en el extremo lateral distal del brazo, pero sin clínica o signos
subjetivos de debilidad muscular. Finalmente, fueron tratados mediante
descompresión quirúrgica del nervio radial en el canal proximal al tabique
intermuscular lateral, con resultados exitosos.
Cabe
destacar la singularidad del caso, ya que los limitados reportes que
requirieron descompresión quirúrgica fueron parálisis de muy larga evolución en
las cuales no se obtuvo un resultado satisfactorio o fueron cuadros leves sin
compromiso motor.
A pesar
de su baja incidencia, debemos estar familiarizados con este sitio de
compresión para garantizar un diagnóstico temprano y un tratamiento oportuno,
ya que el retraso en la liberación del nervio radial se asocia con una mala
recuperación de la función nerviosa.14
Podemos
concluir en que, si bien el síndrome de Lotem es un cuadro infrecuente, es una
de las causas de una parálisis alta atraumática o relacionada con esfuerzos
repetidos del nervio radial. Es importante conocer su evolución natural hacia
la recuperación sin secuelas dentro del primer mes desde el comienzo de los
síntomas, por lo que el tratamiento inicial de elección puede ser conservador y
si los síntomas persisten por tres meses sin mejoría, se debe indicar la
cirugía para la descompresión del nervio radial en su salida del canal de
torsión, a nivel del tabique intermuscular lateral. Con este procedimiento es
factible lograr una recuperación completa del nervio radial.
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Andrés: https://orcid.org/0000-0001-7426-5990
ORCID de C. E.
Martínez: https://orcid.org/0000-0002-6031-0532
ORCID
I. Orsolini: https://orcid.org/0000-0001-8384-6164
Recibido el
17-1-2022. Aceptado luego de la evaluación el 19-5-2022 • Dr. Juan Martín Patiño • jmpaty2@yahoo.com.ar • https://orcid.org/0000-0002-9036-0442
Cómo citar este
artículo: Patiño JM, Fernández A, Mondino NP, Garay AL, Andrés B, Martínez CE,
Orsolini I. Apraxia severa por atrapamiento del nervio radial en el brazo:
“síndrome de Lotem”. Presentación de un caso. Rev Asoc Argent Ortop Traumatol 2022;87(4):534-539. https://doi.org/10.15417/issn.1852-7434.2022.87.4.1494
Información del artículo
Identificación: https://doi.org/10.15417/issn.1852-7434.2022.87.4.1494
Fecha de publicación: Agosto, 2022
Conflicto de intereses:Losl
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